El café es la bebida más consumida en el mundo, con diferencia, principalmente debido a su aroma y sabor, y a su capacidad para mantenernos despiertos durante toda la noche.
Pero nuestra relación con el café es de amor-odio, con un interminable combate entre sus beneficios y los efectos secundarios de beber una excesiva cantidad de cafeína. ¿Y si hubiese a una versión mejor?
Los granos de café verde son reconocidos en todo el mundo por sus grandes beneficios para la salud. Estos granos son las semillas de la fruta Coffea Arabica que se consumen diariamente en forma de bebida, pero con una gran diferencia: no están tostados, por lo que tienen muchos más componentes activos.
Los granos de café verdes son ricos en ácido clorogénico, que es el principal responsable de la pérdida de peso y muchos otros beneficios para la salud. Pero durante el proceso de tostado de los granos, se pierde este antioxidante natural.
Por lo tanto, desde el punto de vista de la salud, es mucho mejor consumir granos de café verde. El café verde no sabe como el café convencional hecho de granos de café tostados. La bebida tiene un sabor más suave, con un sabor neutro, ligeramente herbáceo. No es amargo como el té verde.
Pero ¿Cómo preparar café con granos verdes? Te vamos a dar dos métodos para que prepares tu taza perfecta para obtener todas las propiedades y beneficios del café verde.
Muele los granos de café verde con un molinillo o robot de cocina para obtener un polvo fino o grueso dependiendo de cómo lo quieras de textura.
Los granos de café verde son granos sin tostar, por lo que son más difíciles de moler que los tostados, y para poder molerlos bien necesitarás un aparato potente.
Divide este polvo en dos tazas y vierte agua caliente. El agua debe estar caliente pero no hirviendo (alrededor de 90°C). Deja que la mezcla repose 10 minutos y luego cuélalo con un colador fino para eliminar todo el polvo.
Puedes agregar azúcar o miel al café verde, pero si buscas obtener todos sus beneficios para la salud, es mejor que no añadas nada.
La preparación de café verde a partir de granos enteros es un método que consume mucho tiempo; por lo tanto, es más eficiente hacer un lote grande.
Remoja los granos en agua durante toda la noche, utilizando la misma cantidad de agua que de granos (o más agua si es necesario).
Después de ese tiempo, hierve los granos a fuego alto; y después de un hervor, deja que cueza a fuego lento durante 15 minutos, removiéndolo de vez en cuando.
Dejamos enfriar la mezcla completamente antes de colarla con un colador para eliminar los granos de la mezcla. Esta mezcla concentra se puede consumir directamente, o añadirla agua filtrada o destilada para diluirla, si quieres un sabor más suave.
También puedes añadir cardamomo u otras especias para darle más sabor a esta bebida saludable.
Si te ha sobrado, puedes guardar el resto en el frigorífico para utilizarlo en un plazo de 3 días.
Sea cual sea el método que utilices para preparar café verde, toma una taza antes de cada comida para optimizar los beneficios.